Laguna Turquesa
Hoy saldremos a caminar hacia un nuevo destino de nuestra provincia. Hemos elegido nuevamente una laguna como punto de visita para disfrutar tanto el recorrido como la llegada a destino ya que estas salidas se deben disfrutar desde el momento que nos vamos preparando
y armando todo lo necesario para la aventura.
El inicio de la senda es sobre la RN3 en el Km 3040. A un kilómetro de la entrada a Esmeralda. Podremos ver una entrada importante desde la ruta y un cartel sobre el gasoducto que nos da la bienvenida al inicio.
La laguna se encuentra sobre la sierra Sorondo y tiene un recorrido total de ida y vuelta de unos 3 kms. Es decir que nos llevará unas 3 o 4 hs para ir y venir. Cómo la Laguna Esmeralda también se encuentra frente al Valle Carvajal y se está a unos 700 metros sobre el nivel del mar.
Para esta caminata tenemos que tener en cuenta que en pocos kilómetros tenemos una importante subida y es por eso que tenemos que tomarnos con tiempo el ascenso para poder disfrutarlo. Siempre ayuda para estos paseos llevar un par de bastones o palos para compartir la energía con piernas y brazos.
Toda la primer parte será un camino cubierto por la sombra que nos da el bosque fueguino transitando un sendero bien marcado con chapitas blancas y amarillas colocadas en los árboles. Siempre tenemos que estar atentos a esas marcas para no desviarnos del camino. Luego de unos 200 metros nos ira acompañando a nuestra izquierda un hermoso arroyo que nace en la laguna y también nos servirá de referencia para orientarnos. Tranquilos y disfrutando seguiremos subiendo mientras hacemos las paradas necesarias para hidratarnos y recuperar fuerzas.
Al salir del bosque nos encontraremos con una hermosa vista de los cerros que protegen a la laguna y si giramos hacia atrás tendremos una vista completa de la laguna Esmeralda a lo lejos y una gran cadena de cerros y glaciares. Ya falta poco y vamos dando los últimos trancos para llegar siguiendo las marcar y el camino bien definido que acompaña al arroyo.
Lo lindo de la Laguna Turquesa es que la descubrís cuando está bien cerquita, sorprendiéndote por sus colores. Y ahora a disfrutar de un rico almuerzo o merienda mientras observamos la belleza de su color envuelto en un tono rojizo de los cerros que la custodian. Y para los que guardan un poco de fuerza les recomiendo subir un poquito más y verla desde la altura. No se van a arrepentir.
Cuando hayamos descansado emprenderemos el regreso disfrutando todas las vistas que nos ofrece este paseo, pensando en el próximo destino a visita.
Recordemos que la preparación para este tipo de salidas es muy importante. Una mochila, líquido para hidratarse, alimentos, anteojos, protector solar, gorrita, campera y si es posible un calzado adecuado para el tipo de terreno.
A disfrutar con amigos o en familia de estos paseos que nos ayudan a mantenernos sanos y nos regalan la excusa del encuentro con la naturaleza.