Partir con un proyecto que llevar a la práctica, significa tener una meta a la cual tender. Deseo de estar juntos, voluntad de hacer y creatividad son tres ingredientes que mantienen unido un grupo y lo hacen crecer. La vida del grupo es algo vivo: un día se discute, otro se afronta un problema, otro nos sentimos más unidos por el sufrimiento de alguno. De lo contrario, el grupo es estático y no respira.
- Entra uno nuevo en el grupo:
- Vamos a esperar a ver qué tipo de compañero es…
- Será la novedad del año;
- ¡Si viene es señal de que le interesa nuestro grupo!
- ¿Cómo te relacionas con un amigo nuevo?
- Lo acoges como si lo hubieses conocido de siempre;
- … al principio te mantienes reservado; ¡luego te abres!
- Esperas a que él/ella manifieste el deseo de conocerte.
- ¿Qué beneficios obtendrá el grupo de la llegada de una persona nueva?
- Depende de cómo se comporte el recién llegado;
- ¡Cuantos más seamos, mejor!
- Tal vez el grupo se dividirá en grupitos.
- ¿Y si te sucediese a ti entrar en un grupo nuevo?
- ¡Me encontraría en dificultad!
- Esperamos que me fuese bien…
- Al principio será difícil, pero acepto el reto.
Haz la suma y comprueba:
De 4 a 10 puntos: Estamos bien así.
Piensas en un nuevo compañero como en un posible desestabilizador de la vida del grupo. En realidad, podrá poner a disposición del grupo su experiencia y su riqueza. No hay que temer el encuentro. Tú también tienes mucho que dar a quien entra; y el grupo te pide que seas acogedor, sereno y abierto.
De 11 a 15 puntos: Dame tu mano, pero…
No eres la persona que se lanza rápidamente a encuentros nuevos. Prefieres observar cómo se comportan los demás y luego actúas en consecuencia. En una palabra, no te gusta exponerte y, antes de estar seguro de que la persona que tienes delante es cabal, prefieres observarla. Este comportamiento es típico de una persona reflexiva. Lo importante es que tú no pierdas demasiado tiempo… mirando a ver qué hacen los demás.
De 16 a 20 puntos: Con los brazos abiertos.
Eres un entusiasta de la vida, de la amistad, de las experiencias nuevas. Te gustan los encuentros; por este motivo, la llegada de alguno nuevo al grupo siempre te causa alegría. Te sientes atraído ante el nuevo que llega y, por eso, eres acogedor; y esta cualidad la transmites también a los demás.
Revista Misión Joven N° 311